Esta nota fue publicada en AIRE DIGITAL.
Lo que debió ser un hecho para celebrar, terminó generando el mayor enfrentamiento político entre el gobierno y la oposición de Santa Fe desde la asunción de Omar Perotti en la Casa Gris.
Desde la oposición adelantan su total rechazo a este acuerdo cuando sea debatido en la Legislatura. Y advierten que solo modificarán su postura si el Ministerio de Economía de la Provincia y la Afip brindan datos que prueben, de manera irrefutable, que este convenio permitirá elevar de tal modo los niveles de recaudación, que el Estado santafesino terminará ganando dinero a pesar de sacrificar el 1,9% de su coparticipación.
A estas alturas de las circunstancias y en un país con tamaña inestabilidad, parece al menos poco probable que se alcance semejante nivel de certeza.
La pregunta de los millones
Pero más allá de los enfrentamientos entre oficialismo y oposición en Santa Fe, de las pujas políticas y de los cálculos económicos; de este conflicto surge una pregunta inevitable: ¿la Afip solo comparte información crucial sobre los contribuyentes argentinos con las provincias que pagan por acceder a ella?
Suena a obviedad, pero a estas alturas parece necesario recordar que la Afip no es una consultora privada, sino un organismo estatal y, tal como su nombre lo indica, “federal”: Administración Federal de Ingresos Públicos.
Los descuentos a la coparticipación para sostener a la Ansés y a la Afip no son historia nueva. Santa Fe y otras provincias -como por ejemplo San Luis- se opusieron a estas detracciones. Durante la gestión de Hermes Binner, el caso llegó hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación hasta que, en noviembre de 2015, el máximo tribunal ordenó que la Nación dejara de quedarse con dinero de Santa Fe para sostener la Ansés, y que se suspendieran los descuentos de coparticipación para contribuir con el funcionamiento de la Afip.
Además, los fallos ordenaron que el Estado central devolviera los fondos retenidos por estos conceptos entre 2006 y 2015 a Santa Fe y a San Luis.
En estos momentos, todas las provincias argentinas aportan el 1,9% de su coparticipación a la Afip, salvo dos excepciones: Santa Fe, porque logró este fallo favorable de la Corte; y La Pampa, porque inició en su momento un juicio por el mismo motivo.
¿Qué sucedió con San Luis?: en 2017, esta provincia aceptó reiniciar sus aportes del 1,9% de la recaudación a la Afip, a cambio de que la Nación refinancie una deuda por aportes patronales impagos desde 2001. En otras palabras, San Luis aporta a la Afip el 1,9% de su recaudación anual, pero logró que licuara este pasivo.
Según la explicación de los partidos de la oposición en Santa Fe, el resto de las provincias sigue realizando aportes a la Afip por una situación similar a la de San Luis. Están endeudadas con el Estado nacional y, sacrificar parte de su coparticipación, les permite refinanciar sus deudas.
Lo que Santa Fe aporta, lo que Santa Fe recibe
Estos cruces entre oficialismo y oposición reavivaron el debate sobre cuánto aporta Santa Fe al Estado nacional y cuántos fondos retornan a la provincia.
En este escenario, el Gobierno nacional acaba de profundizar las asimetrías en los subsidios que destina a sostener el transporte público del Gran Buenos Aires y del resto de las provincias del país.
El hecho no pasó desapercibido para el Gobierno de Santa Fe. El diputado nacional Roberto Mirabella -uno de los principales referentes políticos del sector que lidera Omar Perotti- criticó con dureza al gobierno central: “Por estas asimetrías, a veces parece que Santa Fe, en lugar de estar integrada a un proyecto de país, está anexada. Es inaceptable que tengamos un país donde haya ciudadanos de primera y de segunda. Con el gran aporte que hace la provincia de Santa Fe, con todo lo que invierte, produce y paga de tributos, nos parece injusto que se la trate de esta manera”.
Pocas horas después, se sumó un tweet del secretario de Transporte de Santa Fe, Osvaldo Miatello: “En el Boletín Oficial de hoy, se publicó la Resolución 443/22 del Ministerio de Transporte de la Nación. En su anexo XI destina 24.700 millones mensuales al transporte automotor de pasajeros del AMBA. Todo el interior recibe este mes 3.850 millones. Dos países distintos”.
Es verdad que, en gran medida, estos niveles de recaudación en Santa Fe son posibles gracias al trabajo, a los equipos técnicos y a la información de la Afip sobre los contribuyentes. Y que contar con dicha información seguramente permitiría elevar la recaudación de la Administración Provincial de Impuestos.
En lugar de debatir sobre cuánto más podría recaudar Santa Fe si contara con datos de la Afip sobre los contribuyentes de la provincia, la pregunta clave parece ser otra: ¿acaso Santa Fe y el resto de las provincias no tienen derecho de acceder a esa información, sin necesidad de pagar por ella?
Sin embargo, los 1,6 billones -sí, billones- de pesos aportados por los santafesinos a la Nación en 2021 parecen más que suficientes como para que, además, se le descuente a la Provincia el 1,9% de su coparticipación bajo el argumento de sostener el funcionamiento del organismo recaudador.
En lugar de debatir sobre cuánto más podría recaudar Santa Fe si contara con datos de la Afip sobre los contribuyentes de la provincia, la pregunta clave parece ser otra: ¿acaso Santa Fe y el resto de las provincias no tienen derecho de acceder a esa información, sin necesidad de pagar por ella?
Suena a obviedad, pero a estas alturas parece necesario recordar que la Afip no es una consultora privada, sino un organismo estatal y, tal como su nombre lo indica, “federal”: Administración Federal de Ingresos Públicos.