Jorge Obeid sabe perfectamente que por delante tiene una tarea que no es para nada sencilla. En apenas 45 días, deberá hacer lo necesario como para revertir el resultado de las elecciones primarias, en una provincia donde al kirchnerismo nunca le ha ido del todo bien.
En este contexto, se ve obligado a moverse con el equilibrio necesario para superar un verdadero dilema: encabezar la lista de candidatos del Frente para la Victoria, aclarando que él mismo no es kirchnerista.
“Yo soy un peronista de toda la vida”, advierte con insistencia. Su esfuerzo argumentativo es tal, que incluso involucra a la presidente de la Nación: “Yo nunca la escuché a Cristina Fernández decir que ella es kirchnerista. Ella se planta frente a las cámaras y dice “yo soy peronista””.
Político de mil batallas -concejal, intendente, dos veces gobernador y legislador nacional-, no dramatiza frente al resultado electoral de las primarias. Asegura que el problema radicó, básicamente, en el escaso margen de tiempo que tuvo para hacer campaña: “Tuvimos apenas 41 días, frente a dirigentes como Hermes Binner o Miguel Torres del Sel que estaban instalados como candidatos desde hacía un año”.
Obeid sabe perfectamente que su objetivo central será recuperar al menos parte de los votos peronistas que terminaron apoyando a Torres del Sel: “Tengo un profundo respeto por las decisiones que toma la gente, pero creo que en esa cantidad de votos hay muchos peronistas que no estuvieron conformes con algunas de las políticas del gobierno nacional y que tendremos que saber atraer”.
Confía en que algunas medidas del gobierno central -aumento del mínimo imponible de Ganancias, incremento de la Asignación Universal por Hijo, etc.- lo ayudarán en octubre y logrará recuperar el terreno perdido.