El tablero político nacional de cara a las elecciones presidenciales del año que viene comienza a aclararse. Y eso es bueno para todos.
Eduardo Duhalde, Felipe Solá, Carlos Reutemann, Francisco De Narváez, Juan Carlos Romero, Adolfo Rodríguez Saá, Ramón Puerta, Jorge Busti y Mario Das Neves, firmaron un documento en el que acordaron que todos se encolumnarán detrás de un único candidato que represente al peronismo disidente.
La senadora Hilda Duhalde explicó que el mecanismo será bastante sencillo: cuando las elecciones estén cerca, se analizará cómo mide en las encuestas cada uno de los interesados en la candidatura y de allí saldrá el nombre del político que representará una alternativa peronista al kirchnerismo en 2011. El riesgo mayor será que los sondeos muestren paridad entre dos o más dirigentes, pero ya habrá tiempo para dirimir esta hipotética situación.
Hilda Duhalde mencionó entre los interesados en la Presidencia de la República a su marido Eduardo, a Felipe Solá, a Mario Das Neves y, posiblemente, Alberto Rodríguez Saá. Dejó de lado a Carlos Reutemann: “Me ha dicho personalmente en varias oportunidades que no va a ser candidato… Yo siempre digo la verdad”.
La firma de este documento se produce pocos días después de otro importante antecedente que también contribuye a aclarar el panorama.
En la interna del radicalismo bonaerense, Ricardo Alfonsín derrotó al sector que responde al vicepresidente Julio Cobos. Aunque el mendocino intente disimular el golpe con frases efectistas -”Para ser campeón hay que ganar todos los partidos”, dijo horas después de la derrota- y a pesar de que en política el tiempo puede resucitar hasta al más vapuleado, lo cierto es que el hijo del viejo caudillo radical dio un enorme paso hacia su candidatura presidencial.
El tablero político comienza, entonces, a tomar forma. Queda claro que habrá un candidato kirchnerista y que todas las miradas apuntan a Néstor; que el peronismo disidente dará pelea con uno de los hombres que firmaron el documento de unidad; y que Ricardo Alfonsín sacó una cabeza de ventaja al resto de los dirigentes del radicalismo y de la Coalición Cívica.
Todo indica que Pino Solanas representará una cuarta alternativa, seguramente tentadora para ese sector del electorado volcado hacia la izquierda y que no coincide con el discurso y las formas del kirchnerismo.
La mayor incógnita pasa por estas horas por qué postura adoptará Mauricio Macri. Golpeado por las denuncias de espías en el gobierno porteño, sintió un soplo de aire fresco cuando su nombre volvió a los primeros lugares durante la celebración del Bicentenario. Sin embargo, parece haber quedado demasiado aislado frente al abroquelamiento político que se acelera a medida que 2011 se acerca.
En definitiva, el panorama político en la Argentina comienza a ser más claro luego de un período demasiado turbulento, caracterizado por enfrentamientos constantes y por la falta de acuerdos básicos entre quienes aspiran al poder. Y eso es bueno. Para todos. Gane quien gane.
AUDIOS
