Esta nota fue publicada en Aire Digital
Una vez más, el viejo, querido y vapuleado Puente Carretero es noticia. A punto de cumplir 86 años desde su habilitación —el 14 de julio de 1939—, el puente que atraviesa el río Salado para unir las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé volvió al foco de la atención pública entre la noche el 1 y la mañana del 2 de abril.
Luego, el Gobierno de Santa Fe anunció la construcción de un puente paralelo —con fondos provinciales—, que contribuya a aliviar el tránsito de un Carretero que muestra evidentes signos de deterioro, generado luego de casi 9 décadas.
Pero en los tiempos que corren, los umbrales de la capacidad de asombro para el ciudadano común parecen moverse hasta límites insospechados.
El Puente Carretero es responsabilidad a la Nación, ya que integra el corredor de la Ruta Nacional 11.
Durante la tarde de este 1 de abril, desde las áreas de Prensa de Vialidad Nacional se compartió con los medios de comunicación una nota dirigida a nadie —literalmente— y sin firma alguna, en la que se plantea que esta repartición “ha constatado la ejecución de trabajos en la zona de obra sin la debida autorización, motivo por el cual intimó a la Dirección Provincial de Vialidad de Santa Fe a cesar de inmediato dichos trabajos, bajo apercibimiento de iniciar las acciones legales correspondientes”.
En el membrete de esta nota sin firma, se mencionan al Ministerio de Economía de la Nación y a la Secretaría de Transporte.
Los funcionarios provinciales aseguran que se enteraron de la novedad a través de los medios. Tanto es así, que el titular de Vialidad de Santa Fe, Pablo Seghezzo, contó en AIRE que apenas leyó la noticia corroboró si había llegado alguna comunicación oficial, y esto no había sucedido.
Mientras tanto, el senador provincial Paco Garibaldi no descartó que se tratara de una fake news (noticia falsa), algo imposible porque fueron los canales oficiales de Prensa de Vialidad Nacional en Santa Fe los que difundieron el dato.
Consultar desde un medio de comunicación sobre este tema —o cualquier otro— a funcionarios de Vialidad de la Nación resulta inútil, ya que los representantes de dicha repartición en la provincia de Santa Fe tienen prohibido hablar públicamente, sin el permiso específico desde Buenos Aires.
Los reclamos de Nación ante la construcción del nuevo Carretero
La nota enviada a los medios plantea situaciones muy con concretas: “Hasta la fecha, no se ha recibido respuesta alguna —a las supuestas intimaciones— ni han sido designados los representantes de la Dirección Provincial de Vialidad para completar los cuadros técnicos que permitan la adecuada interacción entre ambas reparticiones en la supervisión, el proyecto y la evaluación ambiental de esta obra de gran importancia”.
Vialidad de la Nación asegura que el 25 de octubre de 2024, el 12 de marzo de 2025 y el pasado 21 de marzo, se pidió a la Provincia de Santa Fe información sobre el plan de contingencia hídrica, ambiental y de seguridad vial; además de la designación de funcionarios especializados en áreas técnicas vinculadas a la obra.
Llama la atención cómo un Gobierno Nacional que, literalmente se desentendió del mantenimiento de las redes viales que atraviesan la provincia de Santa Fe, muestre este interés a partir de la decisión de la Provincia de construir un nuevo puente con fondos propios. Pero bienvenida sea la preocupación.
A través de su cuenta de X, el ministro de Obras Públicas de Santa Fe, Lisandro Enrico, expresó: “La obra consiste en un nuevo puente provincial que se va a construir sobre el río Salado, de jurisdicción provincial, y enlazará dos márgenes del río; una perteneciente a la Municipalidad de Santo Tomé y la otra a la Municipalidad de Santa Fe, con lo cual no hay ninguna interferencia en áreas del Gobierno Nacional (…) Cuando el grado de avance de la obra amerite solicitar permiso de uso de algún espacio nacional, se tramitará la correspondiente solicitud de permiso”.
Esta es una verdad a medias, ya que la nueva obra se realiza junto a un puente que tiene 86 años —con los riesgos que puede generar, por ejemplo, el movimiento de suelos— y, tarde o temprano, ese “puente provincial” se enlazará con una ruta que es jurisdicción nacional.
De hecho, habrá que enterrar, cerca del viejo puente, los nuevos pilotes que tienen altura promedio de 30 metros, equivalente a un edificio de 10 pisos.
Enrico agregó que la Provincia de Santa Fe viene brindando información “conforme se avanza con la obra y se presenta la documentación”.
Sin embargo, no parece ser mucha la documentación presentada hasta el momento a la Nación ya que, según Pablo Seghezzo, “el proyecto ejecutivo del puente todavía no está”…, “la evaluación de impacto ambiental ya está presentada en el Ministerio de Ambiente (de la Provincia)”, “los estudios de suelo se están haciendo ahora” y “todo el relevamiento del cauce del río se iniciará en breve”.
Nuevo Puente Carretero: Santa Fe y Nación se comunican por Whatsapp
—¿Entonces la Provincia está informando a la Nación sobre los pasos que se van dando?, se le preguntó a Seghezzo desde el programa Ahora Vengo.
—”Tenemos correos mandados, Whatsapp mandados, mucho intercambio de información. Hay que ver cuál es el canal oficial, porque Nación cambió su canal oficial de trámites aproximadamente el 20 de febrero, capaz se estén acomodando. Vialidad Nacional está con muchos inconvenientes internos de funcionamiento”, respondió el funcionario.
El grado de informalidad en el manejo de la situación es evidente. Cuesta entender que un tema tan importante y costoso —el presupuesto del nuevo puente oscila en los 40.000 millones de pesos— se esté manejando a través de mensajes de Whatsapp y correos electrónicos.
“Hablar con el Distrito 7 de Vialidad Nacional no es tan complejo, ya que es una persona de la provincia de Santa Fe. Nos mandamos Whatsapp”, insistió Seghezzo.
—¿Entonces hablaron con las autoridades locales de Vialidad Nacional?
—Estoy esperando las respuestas a los Whatsapp.
—¿Hay problema de comunicación?
—Puede ser que así sea… No tenemos ninguna intimación. Esa nota nos vino por los medios.
Cuestiones negativas nos pasan en la vida a todos. Pero también hay cuestiones positivas. Hay que ver dónde uno se centra. No es para decir que es algo menor, pero no hay intimación formal, no hay nada judicial.
Estamos haciendo los contactos telefónicos para ver con esa nota qué paso, qué se necesita presentar.

