Tony Kamo se presenta como mentalista, hipnotizador y psicólogo, pero aclara que lo que hoy hace es ejercer la psicología. Este sevillano de 48 años, se hizo mundialmente conocido a principios de los noventa por sus shows televisivos en los que hipnotizaba no sólo al público presente, sino también a estrellas del espectáculo.
Recientemente estuvo en Santa Fe y participó del programa Palabra. Fue una entrevista tensa, donde se lo consultó sobre sus habilidades, pero también sobre la existencia de posibles estafadores en su profesión e, incluso, acerca de algunas denuncias públicas que se plantearon en su contra en otros países a lo largo de los últimos años.
Kamo explicó que nadie puede hipnotizar a otra persona con un simple chasquido de los dedos y reconoció que, cuando él lo hacía en programas de televisión, quienes aparecían en pantalla habían sido “pre hipnotizados” minutos antes.
Asegura que el “showman” forma parte del pasado porque en estos momentos está dedicado a dictar seminarios para ayudar a la gente a enfrentar algunos problemas puntuales, como por ejemplo dejar de fumar o bajar los niveles de ansiedad y estrés.
Advierte que no tiene poderes especiales, sino que simplemente aplica técnicas específicas con la habilidad necesaria como para que, en general, resulten efectivas.
– ¿Nunca ejerciste como psicólogo?
– Sí. Lo sigo ejerciendo todavía. No hace falta ejercerlo desde tu diván o tu sala. Hay muchos lugares. Uno de ellos pueden ser los seminarios, una terapia grupal maravillosa, con mucha información. O a través de los medios de comunicación donde incitas, haces mover un poco la sensibilidad, haces ver que te pueden ayudar si tienes algún tipo de trastornos de los que yo hablo.
– Supongo que si un psicólogo te escucha dice que lo tuyo es otra cosa.
– Todas las profesiones tienen sus derivados, vertientes, caminos.
– El hecho de haber dedicado parte de tu vida a formar parte del espectáculo, ¿no puede quitarle algo de credibilidad a tus seminarios y a tu rol de psicólogo?
– No. La gente en ningún momento lo plantea. Al contrario. Lo que yo hice fue difundir y enseñar qué cosas increíbles se pueden hacer con la hipnosis.
