Esta nota fue publicada en airedesantafe.com.ar
Cuando los policías llegaron las camas estaban desarmadas, las mesas se encontraban servidas, las heladeras estaban llenas y los platos aún tenían comida. Pero los delincuentes que buscaban se habían esfumado poco antes de que los uniformados irrumpieran en 24 allanamientos que se realizaron el 18 de noviembre de 2021 en la ciudad de Rosario. No quedaron dudas: alguien había advertido a los miembros de la banda conocida como el “Clan Villalba” que estaban a punto de ser sorprendidos y por eso escaparon rápidamente de los sitios donde se encontraban.
Este martes, también en Rosario y en Roldán, se realizaron de manera exitosa 21 allanamientos simultáneos con la participación de cerca de 300 personas, tres sectores diferentes de la policía, integrantes del Ministerio Público de la Acusación y del Ministerio de Seguridad de Santa Fe. Esta vez no existieron filtraciones, se logró encontrar un verdadero arsenal valuado en 20.000 dólares y se detuvo a Luciano Cantero, miembro de la banda de Los Monos de apenas 18 años, y a su clan de alrededor de diez personas.
¿Cómo evitaron que se filtrara información antes de la detención de Luciano Cantero, a pesar de que había tantas personas involucradas?
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Jorge Lagna, explicó a AIRE que “apenas tres personas dentro del Ministerio” sabían que se estaban planeando estos 21 allanamientos simultáneos para dar con Luciano Cantero, su clan y encontrar armamento. Y desde el Ministerio Público de la Acusación el caso también fue manejado con el mayor de los sigilos.
“Debo reconocer la profesionalidad de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE), de la Agencia de Investigación Criminal y de las áreas de la Unidad Regional II que participaron de los operativos. En total y en el momento clave había cerca de 300 personas participando”, remarcó Lagna.
La mayor parte de los allanamientos se realizó en el barrio La Granada, donde el 25 de diciembre pasado efectuaron más de 50 disparos contra una camioneta de la policía. Aquel ataque no produjo víctimas de milagro. Los efectivos se defendieron a los tiros luego de arrojarse del vehículo, ya que al menos 12 de los impactos de bala terminaron en la cabina del móvil. La camioneta fue literalmente acribillada aquella madrugada, en una zona que se encuentra apenas a tres cuadras del casino de Rosario.
Fue justamente desde la playa de estacionamiento del casino donde el subsecretario de Investigación Criminal de la Provincia, Andrés Rolandelli, montó su centro de comando mientras se realizaban los allanamientos. “Todos los operativos en La Granada fueron controlados por este funcionario con la utilización de un dron en tiempo real, que sobrevoló el territorio observando el accionar de la policía”, remarcó Lagna.
El ministro resaltó que “hace poco tiempo tuvimos que refundar el Ministerio de Seguridad y éste es uno de los funcionarios que ocupa un cargo clave para este tipo de acciones. Antes se desempeñaba en el área de formación policial”. La decisión es que un funcionario político participe siempre de manera personal en operativos como los que se realizaron este martes en Rosario.
También hubo allanamientos en departamentos céntricos de Rosario y en la ciudad de Roldán, pero el núcleo del despliegue policial se produjo en barrio La Granada.
Buscaban armas y las encontraron
Si bien la banda de Los Monos está directamente relacionada con el tráfico de drogas, en este caso los investigadores buscaban armas. Y las encontraron, ya que se toparon con un verdadero arsenal de 24 armas y valuado en 20.000 dólares, con pistolas Glock, Taurus y Bersa, cargadores adaptados que las transforman en ametralladoras. Había bolsas con balas 9 milímetros. Según explica el periodista Germán de los Santos en AIRE, se sospecha que este armamento era utilizado para generar las balaceras y las extorsiones que tienen a maltraer a Rosario desde el año pasado.
Lagna sostuvo que Luciano Cantero había logrado armar su propio clan. Y que a partir del decomiso de más de 30 celulares y documentación, se intentará establecer los vínculos con las balaceras y con el nodo central de la banda de Los Monos.
“Lo que buscaban los fiscales eran armas. Queríamos cortar este poder de fuego que se hizo evidente en el ataque a la camioneta de la policía y en imágenes que los mismos delincuentes compartían en redes sociales”, explicó el ministro.
“En una ocasión colocaron estas mismas armas sobre una mesa con un mantel de hule. Las fotografiaron y compartieron las imágenes. Tanto es así que los investigadores pudieron reproducir la misma la escena con las armas secuestradas durante los allanamientos de ayer”, insistió.
A principios del año pasado, Luciano Cantero participó de un video grabado en Rosario por el trapero Zaramay -su nombre real es Agustín García- en el que exhibían armas de guerra de todo tipo. En un principio se pensó que se trataba de armamento de utilería, pero luego de analizar las imágenes los investigadores concluyeron de que se trataba de un arsenal verdadero.
El músico estuvo unos días detenidos, hasta que en marzo firmó un acuerdo judicial: se comprometió a pedir disculpas públicas a través de las redes sociales y contribuir con donaciones a la Asociación Civil Uniendo Caminos.
Lagna explicó que el material secuestrado durante los allanamientos de este martes será analizado por varios fiscales que vienen conduciendo distintas investigaciones.
Los detenidos recién fueron trasladados desde sedes policiales a unidades carcelarias a las 2.30 de la madrugada de este miércoles, no sólo por los trámites burocráticos necesarios luego de 21 operativos de este tipo sino, también, por una cuestión de seguridad: “Sabíamos que había gente en las inmediaciones dispuesta a dificultar el movimiento de los detenidos”, afirmó el ministro.
